MITOS DEL AMOR ROMÁNTICO
Lo que se nos trasmite sobre el amor
y las relaciones
La
familia, los medios de comunicación, la sociedad o la cultura son agentes que
nos pueden influir de forma inconsciente en nuestra manera de entender el amor
y las relaciones. Y es que desde nuestra infancia estamos expuestos a una serie
de mitos sobre el amor. Estos mitos los entendemos como creencias compartidas
que son transmitidas de generación en generación, sin cuestionarse su validez y
fomentando expectativas irreales que terminan siendo fuente de frustración y
malestar.
Antes
de seguir con la lectura, te invitamos a que reflexiones sobre tus creencias
respecto a este aspecto y, que posteriormente, reanudes el texto y leas los
siguientes ejemplos de mitos del amor romántico.
Mito de la media naranja.
Según esta creencia todas las personas tenemos predestinada a una pareja que
nos complementa, siendo ésta nuestra única opción. Ligado a este mito aparecen
las ideas de que únicamente tendremos “un amor verdadero” y que nuestra
felicidad dependerá de encontrarlo.
Mito del enamoramiento.
En él se equipara el enamoramiento al amor, por lo que si se termina la pasión
se considera que se ha acabado el amor. Una idea más realista sobre este
aspecto es considerar que las relaciones y sentimientos son mutables,
evolucionan y maduran a lo largo del tiempo.
Mito de la omnipotencia del amor.
Según este mito “el amor todo lo puede”, lo cual conlleva que su simple
existencia puede ser suficiente para que se superen todos los obstáculos que
aparezcan en la relación, que se perdonen o aguanten comportamientos dañinos, o
que se continúe en una relación no satisfactoria con la esperanza de que el
otro cambiará por amor.
Mito de los celos.
En él se observa esta emoción como una prueba de amor y su ocurrencia es algo
positivo en la relación o una forma de constatar que realmente se está
enamorado/a. Sin embargo, los celos son un indicador de inseguridad y miedo a
perder a aquello que se percibe como una posesión, en este caso a la pareja. Sentirlos
no tiene por qué resultar nocivo para la relación, pero sí la gestión que
hagamos de los mismos.
Éstos
son sólo una pequeña recopilación, podemos encontrar más relacionados, por
ejemplo, con el matrimonio, la fusión con el otro, la fidelidad, la
exclusividad, los conflictos, la intimidad… Conocer y reflexionar sobre estos
mitos románticos nos puede ayudar a observar la influencia de los mismos en
nuestras relaciones, identificar creencias erróneas y crear vínculos más
satisfactorios. En cambio, la interiorización de éstos, según distintas
investigaciones, puede ser un factor de riesgo para aceptar comportamientos y
actitudes que no son propios de una relación sana e incluso para la aparición
de la violencia de género.